Próxima exposición: abril - mayo de 2019
Le cabinet des incongruités
de Pablo García
Comisarios de la exposición: Jorge Cañete y Alejandro Sáenz de Miera Guerrero
Pablo Gaga, Pablo García García García o Pablo Jeje, nacido en León en 1975, son algunas de las identificaciones que suele utilizar este importante artista, como referentes explícitos y delimitadores de sus diferentes proyecciones artísticas en el ámbito público. Es un creador polifacético que ha mantenido una intensa y fructífera actividad desde que se licenció en Diseño y Audiovisual en el año 2000, en la Facultad de Bellas Artes de Salamanca. Tiene una amplia trayectoria en la que podemos destacar algunas muestras realizadas en la galería Cubo Azul, la galería Fúcares, DA2 de Salamanca y varias convocatorias colectivas en ARCO 06 y ARCO 08, en el Centro Leonés de Arte (ILC) o el MUSAC entre otros. Sus creaciones están presentes en diferentes colecciones y han sido analizadas por destacadas figuras del arte contemporáneo, entre ellas el profesor y comisario Javier Hernando Carrasco, el crítico de País Alberto Martín y el analista cultural de ABC Francisco Carpio.
La serie Collage nutre y da forma al contenido de esta publicación y de la exposición presentada en el Centro Leonés de Arte ILC, compuesta por un conjunto de cien piezas. La serie toma como punto de partida el interés de Pablo García por un proyecto colectivo concebido en 2014 en Madrid entre tres artistas del collage y desarrollado posteriormente por múltiples artistas de nivel nacional e internacional, centrado en la recuperación de la técnica tradicional y purista del collage fotográfico clásico, una propuesta en el que los integrantes del colectivo debían realizar un collage por día: Los Días Contados.
Pablo García García es un creador procedente del campo de las nuevas tecnologías aplicadas a la creación plástica, el diseño y la imagen, y por tanto del mundo virtual, y de repente su interés le llevó a sumergirse en un mundo totalmente desconocido pero profundamente interesante, que le presentó y le transmitió. a momentos histórico-artísticos de los años 20 y 30 (en España Josep Renau o Nicolás Lekuona) reenfocándose en parte en el campo del collage fotográfico pero con herramientas tecnológicas actuales. El espacio de búsqueda de imágenes y material fotográfico para la formulación de sus investigaciones se centrará no en el territorio impreso sino en el vasto y heterogéneo mundo de los medios de comunicación y de la iconosfera informativa, una inmensa base de datos, disponible en redes y de fácil e inmediato acceso que amplía la origen de archivos y documentos a dimensiones globales; así como el procesamiento de imágenes por computadora en lugar de las producidas a mano.
La elección de las imágenes por parte de Pablo García es minuciosa y sutil, cuestión que plantea o se acerca a la idea del apropiacionismo (ya que las imágenes fueron captadas, creadas o creadas por otros fotógrafos, diseñadores o artistas) como parte esencial de su trabajo, simplemente como ocurre en el de muchos creadores actuales como Rogelio López Cuenca, el colectivo Mundo Feliz y Pablo Genovés. Aunque se llama así desde los años 1980, este término se refiere específicamente al acto de copiar o citar la obra de otro artista para generar una nueva creación, más o menos modificada del original. Pablo, a partir de la selección de imágenes, recurre a la articulación de componentes distintos e incluso opuestos, la fusión, la manipulación, el procesamiento y la simulación, que serán claves esenciales en una parte muy sustancial de su obra como ocurre en otras series de su género: Desideratum. , Los Hijos que no tuvimos o Bloody Mary, a excepción de algunos trabajos puramente documentales, fruto de rodajes fotográficos y archivos no manipulados, como Crack, que incorpora un intenso sentido crítico en relación a la actual situación económica de León, o el Memento. Serie Mori, que ofrece un enfoque nostálgico y de la memoria del pasado y el sentido efímero de la existencia humana y cultural.
Las obras muestran una composición uniforme utilizando una estructura muy centralizada y equilibrada, de exquisita sencillez, limpieza y austeridad. Dos, tres o cuatro elementos compositivos como máximo, elegidos, adecuados y articulados o combinados entre sí, dispuestos sobre un fondo neutro, homogéneo y blanquecino, idénticos para las obras que componen el proyecto (excepto cuatro), constituyendo una unidad de lectura lúcida. , coherente y perfecto, lleno de sugerencias multidireccionales intensas y evocadoras. Una formulación plástica y conceptual poderosa, impactante, directa y minimalista, que nos deja perplejos y abrumados por la fuerza visual de la imagen reformulada mediante una especie de mecano surrealista y mágico, que en cierta medida evoca al gran maestro del surrealismo fotográfico. o el realismo fantástico de Jorge Rueda, motor fundamental de los cambios producidos en la fotografía española de los años 80. Pablo con algunas imágenes nos provoca el asombro por lo irreal y monstruoso, pero creíble y cercano (Metamorfosis, Pez espada o La Caricia), y al al mismo tiempo por la maravillosa carga polisémica de sus imágenes y títulos (Tres en uno, Montar un Pollo o Vino con Gas), que con irónica y refinada maestría contrapone realidades simbólicas antagónicas. La crítica vivaz e inteligente se desliza con extrema delicadeza y finura entre el juego lúdico e imaginativo de algunas de sus obras, imbuyendo su obra de un sentido mordaz, sarcástico y satírico en relación con la sociedad en ámbitos como el político (6 DE ENERO, Moscón de Reyes ), historia (Sáhara), religión (Parada de Dios o Escena de un crimen), diseño (Dolce Banana), cultura (La Casa Luminosa) o usos (Hooked). Por otro lado, sus composiciones tienen una viva y profunda carga lúdica y poética, que de alguna manera le vincula a la poesía visual de Joan Brossa, resemantizando el significante de forma individual y constructiva. Como ejemplo encontramos la pieza "Pupilas Gustativas" de Pablo en relación con "Eclipse" de Brossa muy cercana en su formulación estética y no conceptual. Hay también una cierta proximidad en la extrañeza de los objetos que plantea Pablo en relación al lenguaje poético de Chema Madoz, si bien este último genera sus creaciones con planos escenográficos a través de maquetas y por tanto de forma real, a diferencia de Pablo que utiliza lo virtual. idioma.
La imagen es esencial en esta propuesta creativa, pero el concepto, la idea, que se transcribe fielmente en el texto o el título de cada pieza, no es menos un elemento estructural que se vuelve esencial en la articulación conceptual y comprensión de la pieza. La exposición incorpora, al mismo tiempo, varios poemas collage de Elena Lafuente Alonso con una interesante aportación estética y visual, ligada a los inicios del dadaísmo europeo. Composiciones frescas, directas, llenas de expresividad, inspiradas o evocadoras de varias de las obras de Pablo, que abren nuevos territorios creativos y de expansión semántica.
Inspirado y traducido libremente del texto original en castellano por
Luis García Martínez / Director Departamento de Arte y Exposiciones, ILC